



Memorias compartidas VI
Escribir con signos inventados, simulando mensajes de otra civilización, de otra época, constituye siempre una suerte de ensayo acerca de las posibilidades y recursos de comunicación humana. Los grafismos por momentos se condensan en apretados conjuntos, pero en ocasiones parecen flotar aisladamente. Son escrituras asémicas que intentan reflejar mensajes de otros que no son sino el reflejo de nosotros mismos. Las mismas conforman una suerte de coro gráfico que se nos presenta más como cuestionamiento que como afirmación. El motivo siempre es hurgar en los orígenes personales y sociales, realizar objetos motivadores, imaginar, jugar, hacerse preguntas. La monocopia es un procedimiento que agiliza resultados, potencia posibilidades, incentiva nuevas búsquedas. Componer con ellas es agregar posibilidades visuales y de sentido.
Collage de monocopias sobre cartones cosidos.
2024
95 x 95 cm